Las extrañas circunstancias acontecidas este año por la pandemia mundial del COVID 19, hizo que la carrera de 3H de resistencia de Castellolí, fuera la primera de las 13 programadas para las motos clásicas en Catalunya , en este ya lamentable año.
Todo y eso se me antoja sencillamente espectacular, la presencia de 35 equipos bajo un sol de justicia, así y todo pronto me dí cuenta de que una de las marcas motociclistas más habituales en este tipo de pruebas, la italiana DUCATI, prácticamente había desaparecido de la parrilla, y que la única presente era "relativamente pequeña", ya que era una Pantah 650, preguntando a alguno de los habituales del padock que en otros tiempos competían con la marca italiana, aducían entre otros motivos, la complejidad de mantenimiento de estas motos y la poca disponibilidad de técnicos cualificados para su mantenimiento, al menos para mí, no encontrar a Alejandro Tejedo con su inseparable Félix Ferrer o a Julià Masip al frente de varios equipos fue una pequeña (personal) decepción, que solo duró breves segundos, ya que cuando empecé a oír el rugido de los 4T , entre los que "se colo" una impecable YAMAHA RD350 de 2T, se me olvidó rápidamente.
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